EL PODER DE LA ORACIÓN POR TUS HIJOS ADULTOS

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Lo Que Debe Saber Todo Padre de un Hijo Adulto

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Descripción

Información Del Producto

Autor: Stormie Omartian
ISBN:
9780789919458
Editorial: Unilit
Formato: Tapa rústica
Páginas: 256
Tamaño: 16.9 cm x 10.8 cm

Descripción del Producto.

«Señor, enseñame cómo orar por mis hijos adultos. Sé que tú eres mayor que cualquier cosa que enfrenten. Gracias porque mis oraciones por ellos tienen poder porque tú me escuchas y responderás. Te ruego que los guies, protejas y ayudes para que lleguen a ser todo para lo que se crearon»>.

QUIZÁ ESTÉS observando a tus hijos adultos que salen al mundo y deseas apoyarlos más mientras les das la libertad que anhelan. Tú puedes. No importa cuán jóvenes ni mayores sean ellos. Puedes descansar en el poder de Dios obrando a través de tus oraciones.

En esta importante continuación de El poder de los padres que oran (más de dos millones de ejemplares vendidos), Stormie Omartian se ocupa de tus preocupaciones únicas como padre de hijos adultos y te muestra cómo presentárselos a Dios. Con historias de otros padres y el conocimiento profundo obtenido de su experiencia personal, Stormie te ayuda a orar con el poder de la Palabra de Dios por tus hijos adultos y sus

  • elecciones de carreras y razón de ser •
  • matrimonios y otras relaciones importantes
  • habilidades en los papeles de padres y líderes
  • luchas financieras y pruebas emocionales
  • fe, salud y capacidad para la toma de buenas decisiones


«Cuando le llevamos nuestras preocupaciones al Señor, confiando en que Dios escucha nuestras oraciones y las responde a favor de nuestros hijos adultos, significa que nuestras oraciones tienen el poder para realizar cambios en sus vidas», dice Stormie. «Además, eso nos da una paz que no podemos encontrar de ninguna otra manera»>.

Con, El Poder de la oración por tus hijos adultos, puedes ayudar a tus hijos adultos a escuchar de Dios, a fin de que los guíe a hacer lo que él desea. Cada padre puede descansar en el poder de la oración para entregar a su hijo al cuidado, la protección y la dirección que proporciona Dios.